domingo, 26 de junio de 2011

EL CISNE NEGRO - Manuel Martínez Acuña

NOTA AL MARGEN:
El  título de “Cisne negro” que rotula a este poema, no viene a ser más que tomar prestado el tráiler de la conocida película de suspenso psicológico, rodada y dirigida por Darren Oronofsky, bajo ese nombre; y, porque de alguna manera u otra va sumida en él, cierta semejanza con su corcovado guión, al momento de concederse –ante los imprevistos del equívoco-, el "PREMIO NOBEL DE LA PAZ"
Veamos lo que dice:

EL CISNE NEGRO

Un algo de algo a su paso yerra
desde el Nobel de Oslo a las pontificias
profecías de Michel de Nostradamus,
que no venga a ser cosa, como un cisne negro,
que aun siendo umbroso deja una blanca
espuma sobrenadando arcaicas,
viejas estelas; que de lo opaco
hacia lo claro echan el bofe.

Metáfora exacta.
Visa de corso apergaminada.
Oliva olímpica.
Arruga nórdica o magulladura,
que lleva la tilde recóndita
del tartufo de Molière.

Y, así como no hay nada secreto que,
su comportamiento no revele,
más valiera primero preguntarse,
si habría forma segura de entender
a la comunidad científica del Nobel,
sin que el síndrome avieso de Estocolmo
llegase a hacernos cómplices a todos,
en medio de una fauna de colores,
atropelladamente combinados. 

Manuel Martínez Acuña


No hay comentarios:

Publicar un comentario